Diagnóstico

Para el diagnóstico se realiza biopsia de la masa tumoral,  de los ganglios cercanos, radiografías de tórax, ecografía de abdomen, análisis de sangre y de orina. En algunos casos, suele ser necesaria una biopsia de médula ósea.

IMPORTANTE: Se debe tomar biopsia sin demora ante la aparición de una masa cutánea, si tu perro tiene una masa, aunque parezca un lipoma puede estar escondiéndose un mastocitoma.  

 

Tratamiento

El tratamiento va a depender de la localización y del grado de agresividad. En los casos en que es posible realizar la cirugía, esta debe tener márgenes quirúrgicos amplios tanto alrededor del tumor como en profundidad. Si esto no se respeta, puede ocurrir que a los pocos días de la cirugía el tumor vuelva a crecer. Luego de la cirugía, y dependiendo  del grado, también se realiza tratamiento de quimioterapia. 

Hace unos años, han surgido nuevos tratamientos específicos para el mastocitoma, que consiste en medicación que se administra por vía oral, con moléculas inhibidoras de la tirosin quinasa. Estas son drogas de última generación, con escasos efectos adversos y con las cuales se logra la remisión total  o parcial del tumor solo con su administración oral . 

 

Pronóstico

El pronóstico depende del grado del tumor y de su localización. Los mastocitomas grado I o de bajo grado, tienen buena respuesta al tratamiento. Los mastocitomas grado II y III o de alto grado tienen un pronóstico más reservado.